ENCONTRANDO LA LUZ

Fuí a la hora de meditación que nos ofrece la mamá de una amiga, siempre es diferente y regresas como cargada de energía. Esta vez estuvo guíada por Alexis, una persona diksha giver que visitaba la familia.

Llegué y la sala estaba llena de personas, así que busque un espacio, esperando el inicio.

Olga y Gloria, madre y hermana de mi amiga iniciaron dando una entrada a la meditación, la gente preguntaba, alguna que otra llena de dudas, pero las respuesta tranquilas y acertadas fueron llevándonos a estar en paz esperando el inicio de la meditación.

Alexis nos enseño de que se trataría esta vez, sería sobre los chakras y su equilibrio, con un ejercicio que hizo a bien explicarnos. Inicié tensa, pero dispuesta a seguir las indicaciones, me dejé guíar por ella. Hicimos los ejercicios de respiración y un poco incrédula fui sintiendo tal y como nos explicaron, como la energía llegaba al lugar en el que se encuentra hubicado cada chackra, al final nos pidió que nos acostaramos y puso un mantra, el sonido de la musica me llevó a un lugar lleno de paz donde me llené de un regocijo y una felicidad indescriptible, sonreia, pero seguía con los ojos cerrados.

De repente sentí una presencia divina, un hombre de aspecto agradable vestido de blanco que se paró a mis pies y me sonrió, luego se puso de espaldas, se recostó en mi, entrando en mi cuerpo, fué una sensación dificil de expresar, igualmente se acercó a mi un ser querido que hizo lo mismo, me sonrió y dando la espalda se recostó y entró en mí.

Me llené de amor, de paz, de felicidad, tuve ese contacto con el Dios que me ama, que me dice que estoy bien, que está conmigo en cada paso, que llevo dentro de mí. 

Las lagrimas no dejaron de brotar de mis ojos, hasta el punto del sollozo, inundada de Él.

Medita, reza, te llevará a esa comunión con Dios que estamos buscando y que quizás somos incapaces de percibir, pero si tienes fé y esperanza....Él encontrará la manera de llegar a tí.